Te decimos cómo cuidar a los más peques en tu hogar

La seguridad en el hogar es una preocupación primordial para todas las familias, especialmente cuando se trata de proteger a los más pequeños de la casa. Los niños son naturalmente curiosos y exploradores, lo que aumenta la importancia de implementar medidas preventivas para evitar accidentes. Este artículo se enfocará en proporcionar información detallada y práctica sobre cómo garantizar un entorno seguro para los niños. 

 

Entendiendo los riesgos

 

Antes de abordar las estrategias de seguridad, es crucial comprender los posibles riesgos que existen en el hogar para los niños. Entre los peligros más comunes se encuentran: 

 

•  Quemaduras 

Las quemaduras pueden ocurrir fácilmente por contacto con superficies y líquidos calientes, o electrodomésticos. 

 

•  Ahogamientos 

Los niños pueden ahogarse en albercas, bañeras y fuentes de agua, incluso con niveles de agua bajos. 

 

•  Intoxicaciones 

El acceso a productos químicos domésticos y medicamentos puede resultar en intoxicaciones accidentales. 

 

• Cortadas y golpes 

Objetos afilados y esquinas puntiagudas presentan riesgos de cortaduras y golpes. 

 

• Caídas 

Los niños pequeños tienen una mayor tendencia a caerse debido a su falta de coordinación motora y equilibrio. 

 

Estrategias para la seguridad en el hogar

 

•  Protección en escaleras 

Instala puertas de seguridad en la parte superior e inferior de las escaleras evita que los niños pequeños tengan acceso a áreas peligrosas. 

 

• Seguridad en ventanas 

Asegúrate de que las ventanas estén equipadas con protectores para que no puedan abrirse y a así prevenir caídas y permitir una ventilación segura. 

 

•  Enchufes de seguridad 

Cubre los enchufes eléctricos con protectores para evitar que los niños metan sus dedos o algún objeto metálico.  

 

•  Bloqueo de gabinetes 

Utiliza cerraduras en los gabinetes de la cocina y baño para prevenir el acceso a productos peligrosos, ten todos los frascos bien cerrados y etiquetados y a una altura donde ellos o puedan alcanzarlos. 

 

• Supervisión en el agua 

Nunca dejes a un niño solo en el baño, podría resbalarse con el piso mojado y pegarse, cierra la tapa del inodoro ya que podría caerse por el peso de su cabecita. 

Si sales de vacaciones o tienes una alberca en tu casa, no dejes que se acerque solo, ni que vaya a sacar algún objeto de la alberca. 

 

•  Control de temperatura del agua 

Ajusta el calentador de agua a una temperatura segura para evitar quemaduras y antes de que el niño se acerque, prueba antes con tu codo si está a temperatura adecuada. 

 

• Almacenamiento seguro de medicamentos y productos químicos. 

Guárdalos bien etiquetados, en lugares elevados y cerrados con llave. Revisa siempre la fecha de caducidad. 

 

•  Protección contra caídas 

Coloca alfombras antideslizantes o cinta adhesiva debajo de ellas para que no se muevan. Instala almohadillas protectoras en las esquinas de los muebles para reducir el riesgo de un golpe.  

 

 

Educación y comunicación 

Además de implementar medidas físicas, es esencial educar a los niños sobre la importancia de la seguridad y establecer una comunicación abierta. 

 

• Reglas claras 

Establece reglas simples pero efectivas, como no jugar cerca de la estufa, no tocar enchufes y pedir permiso antes de usar objetos peligrosos o puntiagudos. 

 

•  Buena comunicación 

Crea un ambiente donde los niños se sientan cómodos compartiendo sus preocupaciones y preguntas sobre la seguridad en casa. 

 

Manteniendo la seguridad a lo largo del tiempo

 

La seguridad en el hogar no tiene un enfoque único; debe ser revisada y ajustada a medida que los niños crecen y las circunstancias cambian. 

 

• Actualización periódica 

Revisar y actualizar las medidas de seguridad a medida que los niños alcanzan nuevas etapas de desarrollo y adquieren habilidades diferentes. 

 

• Simulacros de emergencia 

Realizar simulacros periódicos para enseñar a los niños qué hacer en situaciones de emergencia, como incendios o terremotos. 

 

Conclusión

 

Al implementar estrategias preventivas y fomentar un ambiente seguro e informado, los padres contribuyen a que sus hogares sean lugares donde los niños puedan crecer y explorar con menos riesgos. La seguridad en casa es una responsabilidad compartida, y cada acción tomada contribuye al bienestar general de la familia. 

 Con nuestra tarjeta VRIM tienes acceso a médicos 24/7 vía telefónica para ayudarte en cualquier percance completamente gratis y un traslado en ambulancia en caso de emergencia sin costo.                                                                   

Porque nadie está exento a los accidentes ¡Siéntete seguro con VRIM! Estamos aquí para cuidar de ti y de tu familia. Adquiere tu tarjeta aquí: https://www.vrim.com.mx/membresias/